EL REGALO MÁS VALIOSO NO SON LAS COSAS, SINO EL AMOR DE LOS PADRES
AUDIENCIA DEL PAPA FRANCISCO
A LOS TRABAJADORES DE LA SANTA SEDE
....Sin embargo, Francisco
consideró la cosa “más importante” de su mensaje su pedido de “cuidar su
matrimonio y a sus hijos”.
“Cuidar, no descuidar. Jugar
con los niños, con los hijos. El matrimonio es como una planta. No es como un
armario, que se mete allí, en la habitación, y basta espolvorearlo de vez en
cuando”, señaló.
El Papa subrayó que “el
matrimonio es una realidad viva: la vida de pareja nunca debe darse por sentada
en ninguna fase del camino de una familia”.
“Recordemos que el don más
valioso para los hijos no son las cosas, sino el amor de los padres. Y no me
refiero sólo al amor de los padres hacia los hijos, sino al amor de los padres
entre ellos, es decir, la relación conyugal. Esto hace tanto bien a ustedes y
¡también a sus hijos! ¡No descuidar a la familia!”, alentó.
El Santo Padre subrayó que
“hablar con los hijos, escucharlos, preguntarles qué piensan, este diálogo
entre los padres e hijos hace tanto bien, hace crecer en madurez a los hijos”.
Además, reiteró la
importancia de los abuelos en las familias. “Los abuelos tienen la memoria, la
sabiduría, no dejar a un lado a los abuelos, son muy importantes”.
“¿Que se discute en las
familias? Lo sabemos todos, un matrimonio que no discute parece anormal, lo
importante es no terminar la jornada sin hacer las paces”, señaló.
“Y ustedes padres cuando sus
hijos han discutido antes de ir a la cama decirles ustedes que hagan la paz,
dense la mano, dense un beso”, pidió.
Francisco alentó a las
familias que si “han hecho la guerra durante el día” no permitan “que esta
guerra se haga fría porque la guerra fría del día siguiente es más peligrosa de
la guerra caliente ¿Entienden? Hacer la paz en la noche siempre”.
El Papa destacó luego que el
Jubileo de la Misericordia se vive “también en la iglesia doméstica, ¡no sólo
en los grandes eventos! Más bien, el Señor ama a quien practica la misericordia
en las circunstancias ordinarias”.
“Esto quiero desearles:
experimenten la alegría de la misericordia, comenzando por su familia”, señaló.
No hay comentarios:
Publicar un comentario